Nutcracker Man

Sabemos desde 2010 que todas las poblaciones humanas fuera de África presentamos en nuestro ADN un pequeño rastro de genoma neandertal, pero no las poblaciones sub-saharianas. Este rastro supone entre el 1 y 3% de nuestro ADN. Además, el estudio del genoma de un hombre de la cueva Mota en Etiopía de hace 4500 años (presentado en octubre de 2015 y corregido en enero 2016), muestra que no presenta rastro neandertal e indica que, posteriormente a este individuo, ocurrió una migración inversa desde Eurasia hace unos 3000 años al Este de África, que trajo una exigua presencia neandertal en el ADN de poblaciones de esa región, entre el 0,3-0,5%.

¿Cuándo se cruzaron? 

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Nutcracker Man

En esta conferencia queremos reflexionar sobre las mujeres en el periodo más largo y remoto de la historia de la humanidad, explorando sus actividades económicas cotidianas, la socialización, la maternidad. Queremos plantear cuestiones sobre el papel de las mujeres en diferentes sociedades del pasado y actuales. Y digo diferentes porque, al igual que los roles de las mujeres varía mucho en la actualidad según la sociedad que consideremos, es probable que lo mismo sucediera en las sociedades del pasado, o incluso con mayores diferencias.

Acercarnos a las evolución del rol de las mujeres desde la Prehistoria, y conocer su importancia en la construcción de nuestras sociedades, debe ayudar a hacernos ver que la historia se construye con mujeres y hombres, con seres humanos que buscaron la mejor manera de sobrevivir como especie.

Durante décadas las mujeres en la Prehistoria han sido relegadas a un segundo plano, pero fruto solo de…

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¿Qué es la Arqueología?

Publicado: diciembre 14, PM en Sin categoría

Nutcracker Man

Bienvenidos al primer artículo invitado en Nutcracker Man: una interesante reflexión sobre Qué es la Arqueología escrita por Adrián Carretón. Adrián es autor de Arqueoblog, premiado como Mejor blog de ciencia 2014 por el diario 20minutos. 

Por lo general las personas sentimos gran atracción por nuestro pasado, los grandes descubrimientos y los enigmas que rodean y envuelven de un velo de misterio la historia del ser humano. Por eso, blogs como este de Roberto Sáez tienen gran repercusión en Internet. Muchas búsquedas en google (el oráculo instantáneo y universal que en ocasiones puede provocar el efecto contrario de “desinformación”) sobre nuestro pasado, intentando encontrar respuesta a las eternas preguntas que nos hacemos como seres racionales: ¿quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Por qué somos como somos?

Preguntas que ahondan en el pasado de nuestra especie, en nuestros orígenes. Gran parte de ese pasado se encuentra enterrado bajo tierra

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¿Dónde está el frente?

Publicado: noviembre 14, AM en Sin categoría

Los archivos de Justo Serna

image¿Se puede decir algo que no sea un bla, bla, bla? ¿Podemos expresar de algún modo nuestro horror? Por supuesto, todo puede empeorarse, todo puede calcinarse. Provocar un Infierno en la Tierra no debe de ser muy difícil. Sólo hacen falta desenvoltura criminal, arrojo temerario y ausencia de piedad.

Víctor, Mercé, Vicent, etcétera, se encuentran bien. A mi hijo, el atentado le ha sorprendido trabajando, trabajando en París. En una televisión, que es en donde está empleado como graduado en Comunicación Audiovisual.

No tenía ocupación en España y se fue, se fueron, para allá, para París. Es un emigrado. Sin saberlo –o sí, sabiéndolo–, esto le ha sorprendido en el frente de batalla.

¿El frente de batalla? En este caso, en el del terrorismo islamista, ¿dónde está el frente? Como admitía Umberto Eco en una entrevista, desde la guerra del Golfo, la guerra ya no se desarrolla entre dos líneas…

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Homo de las Estrellas

Publicado: octubre 14, AM en Cultura

Hace no mucho tiempo, me encontraba paseando por las salas del Museo de Prehistoria de Valencia -que por cierto es un gran museo de divulgación-.  Tienen en una pared, un cuadro evolutivo sobre las diferentes especies del género Homo. Me detuve a mirar esas figuras y tenía la sensación de que algo no encajaba: hay cómo una especie de saltos en nuestra propia filiación o raíz como especie.

Algo que siempre me ha interesado, es el momento en el que dejamos de ser algo muy próximo a los animales, y surgió en nosotros la chispa, en nuestro cerebro o donde sea, que nos convirtió, en comparativa, de un 600 a un Ferrari. De pronto, un ser humano -el Homo Sapiens Sapiens-, era completamente distinto. Y nadie sabe exactamente qué ha pasado.

Me fijaba en las caras de esas criaturas que, des del Hombre de Turcana o Lucy o tantos otros, son nuestros más antiguos antepasados. ¿Qué tuvo que pasar en cierto momento, quizá en lo más recóndito de África, para que una criatura se fuese poniendo sobre dos patas, fuese modificando sus manos para convertirlas en el prodigio que ahora son y que el resto de la naturaleza no hiciese lo mismo? ¿Por qué? Pues todavía no se puede explicar. Por mucho que digan museos, historiadores, científicos, libros… nadie lo sabe.

Lo qué ocurre es que siguen habiendo hallazgos increíbles que consiguen dejarnos a todos estupefactos. El último que ha pasado rápidamente por los medios de comunicación i divulgación se llama Homo Naledi. Y es tan misterioso, o más, que aquella falange, aquel dedo que era una cuarta especie desconocida: el Homo de Misobiano. Es decir: cada nuevo pequeño hueso, cada nuevo pequeño hallazgo, demuestra que en el pasado ocurrieron cosas que pueden tirar toda la estantería sobre la que están construidos nuestros pensamientos: la idea que tenemos de porqué nos hicimos humanos.

El Homo Naledi, la historia de su descubrimiento es tan fantástica que me permitirán unas pinceladas. Andaba un hombre muy voluntarioso y no de gran prestigio en la arqueología porque, grandes hallazgos en lo que somos, han sido descubiertos por personas entusiastas más que academicistas. Pues ese entusiasmo les llevó a tener la ventana abierta más que el resto, y puede que por eso hayan sido recompensadas.

Hace apenas dos años, por una grieta de 25 cm. hay dos individuos que contemplan algo insospechado. Hasta entonces, era una zona en Sud África que había dado buenos fosiles sobre nuestra extirpe pasada. A ese pasadizo le llamaban la grieta de superman: por la postura que tenían que adoptar para pasar por ella. Al final de ese estrecho pasillo se encuentran una nueva cámara. Se quedan impresionados porqué ven una serie de esqueletos, 15 individuos.

Cómo el propio financiador de la investigación nu puede acceder por esa rendija, pide a científicos muy delgados, con muchas ganas que, por favor, bajen allí. Son 6 mujeres: Las 6 del Homo Naledi las que descienden. Se dan cuenta de que hay unos huesos limpios, unos huesos sin marcas de animales, unos huesos  que no han sido lanzados ni han sido devorados. Es decir, han sido colocados. Por el aspecto de los cráneos y la osamenta, parece que los huesos tienen dos millones y medio de años (ahí está el gran dilema).

Esto significa irnos al principio de los principios, cuándo empezamos a ser humanos. Hay en la propia estructura del cuerpo rarezas: el cráneo es muy pequeño y sin embargo, las manos son cómo las nuestras. El pecho pertenece a lo más remoto, lo más simiesco y sin embargo, el mismo hecho de que estén en esa cueva significa que fueron depositados durante siglos, como en un rito.

Todo esto significaría que el rito y el culto a la muerte, el enterramiento, el depositar cuerpos con la consciencdia de que hay algo más después de la vida és el primer ‘funeral’ de la historia. Seguramente estamos con el Homo Naledi, en esa cueva de Sud África, cerca de Johannesburgo, con los primeros ‘funerales’ que se hayan realizado.

Ahora viene lo importante. Hasta el momento, el primer enterramiento de la historia podía tener treinta mil o cuarenta mil años. En la época del pimer Neandertal había ocre en algunos huesos, en el maravilloso Sinadar se dejaron flores. ¿Cuando ese hombre mitad simio mitad persona piensa que hay un más allá y venera a sus muertos?

Mucho antes que cualquier religión, por supuesto. Mucho antes de cualquier dogma. Mucho antes de cualquier escritura sagrada. Dos millones y medio de años del primer concepto de Dios ya existe en en el prehumano una idea de la muerte. Ahí están las pruebas. En lo más abrubto de una cueva inaccesible, depositaron 15 esqueletos como primer signo de el hombre ante la muerte.

¿Cómo es posible? Un hombre que no tenía las facultades plenas del humano ya se comportaba de forma funeraria. Es un sentimiento que empuja al ser humano des del principio de la conciencia.

Una última cosa, Homo Naledi significa Hombre de las Estrellas y esa cueva, es la cueva Rising Star. Así la llamaron hace muchos años, ahí ha sido el gran hallazgo y ahí están las pruebas.

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Una reflexió sobre Europa

Publicado: septiembre 21, AM en Cultura, Opinión, Reflexiones

Els historiadors recordem el que altres volen oblidar, deia Eric Hobsbawm en una afortunada expressió.

La idea d’Europa com el centre de la llibertat i el progrés, unida i amb història comuna, es va fer miques amb la tendència persistent que van mostrar els europeus a matar-se / aniquilar-se durant el segle XX. I el que Europa era el centre de la democràcia va quedar també en quarantena (d’anys, no dies) amb el fracàs del liberalisme entre 1914 i 1945 i l’aparició del feixisme i el comunisme, que, per cert, també formen part del patrimoni polític comú, vulguem o no.

El problema va sorgir també amb l’aparició de visionaris que volien refer / reconstruir Europa. Quan ho van intentar i, ho van fer amb burocràcies i tecnologies modernes, el resultat va ser el genocidi, els camps de concentració, la repressió de tot el que es movia en contra i la mort de la ciència i de la cultura.

Com tot això va començar a ser història a l’Europa occidental de la segona meitat del segle XX (encara que no a la península Ibèrica ni  a l’Est), semblava que hi havia una acceptació universal de la democràcia i la gent ja no havia de lluitar per ella . El què havia triomfat era el capitalisme, no la democràcia. Un capitalisme que es va intensificar des dels anys 90 del segle XX.

D’una banda, la globalització dels mercats financers s’ha imposat a la intervenció de la política sobre l’economia i el culte als diners ha tret a la llum els pitjors vicis d’aquesta subordinació al capital en forma de corrupció i distància entre la política i la societat civil.

D’altra banda, el sindicalisme anomenat de classe, un dels límits a l’explotació, va cedir terreny a la burocratització i a l’adaptació al capitalisme. I una vegada ha caigut també aquesta identitat que tots ja crèiem nostra de l’Estat benefactor, el que queda és una apel·lació a l’ultraliberalisme / individualisme,  o a les propostes populistes de redempció i de refer de nou tot. I lluny d’Europa, triomfant, amb perspectiva futura, el capitalisme autoritari i súper explotador de la Xina (mal anomenada comunista).

En suma, la democràcia ja no té enemics davant (el feixisme o el comunisme), sinó dins (en els polítics, mitjans de comunicació, els nous redemptors…). I per si fóra poc, els Estats / nació, lluny d’esfumar-se, tornen a l’actualitat.

És la crisi la que ha tret, amb tota la seua cruesa, a la superfície la complexitat d’aquestes històries nacionals i culturals, posant al seu lloc als que pensaven que tenim un patrimoni i herència comuns per damunt dels conflictes i les guerres.

Els historiadors recordem el que altres volen oblidar. El present s’assembla al passat, però difereix també molt d’ell. Amb la història es comprova que, davant del caos, els visionaris i promotors del nou ordre ja van deixar empremtes per aquestes terres (espanyoles i europees) no fa molt de temps.

Ich bin Enric Marco: El Impostor

Publicado: julio 29, AM en Cultura

Cuando estalló el escándalo Marco se esgrimieron una gran cantidad de argumentos contra Marco; aunque, también alguno a su favor. En el momento de explosión de esta bomba informativa yo era joven, me picaba el gusanillo de la curiosidad por entender a este hombre y el porqué de sus mentriras. Ahora, con ayuda de Javier Cercas en su libro El Impostor, voy a tratar de desmontar los argumentos en favor del Señor Enric Marco.

El principal argumento contra Marco era insostenible, el que hablaba a su favor también. El principal argumento que se esgrimió contra Marco apenas necesita refutación. La impostura de Marco es un combustible ideal para los negacionistas, entendiendo por tales quienes proclaman que los nazis no eran tan malos como ahora se dice, que Auschwitz no fue un matadero industrial y que los casi 6 millones de judíos muertos son un invento de la propaganda sionista. Apenas hubo en España un comentarista que, a propósito del caso Marco, no repitiese ese argumento. A nuestro hombre le preocupaba bastante que el único daño real que hubiese hecho furea dar aire a los negacionistas. Mientras el estaba en la cresta de la ola, con sus charlas cómo líder de la Amical de Mauthausen, sus esfuerzos se centraban en no dar aire a los negacionistas que amenazaban con borrar de la memoria del planeta a las víctimas del peor crimen de la humanidad.

Todo esto es un disparate. Una locura. Una tontería. Los horrores de los nazis son uno de los hechos más conocidos y mejor documentados de la historia reciente, y a principios del siglo XXI los negacionistas no pasan de ser cuatro anormales perfectamente identificados y tan peligrosos como quienes afirman que la Tierra es plana o que el hombre nunca pisó la Luna. Esta clase de gente no necesita combustible alguno: se alimenta sola. De hecho, que yo sepa, los negacionistas sólo han intentado usar el caso Marco a su favor en una ocasión. Fue en 2009, cuando la Audiencia Provincial de Barcelona juzgaba a Óscar Panadero (propietario de la librería Kali, acusado de dirigir una organización neonazi), y el librero se negó a contestar al abogado que representaba a la Amical alegando que Marco había sido su presidente. Era un alegato absurdo: tan absurdo como si se hubiese negado a contestar al abogado porque aquel día estaba lloviendo o porque hacía sol. Tan absurdo como pensar que pueden ponerse en duda los crímenes nazis porque alguien que dijo que los había sufrido en realidad no los había padecido, o como pensar que puede ponerse en duda la destrucción de las Torres Gemelas de Nueva York porque Tania Head, quien durante mucho tiempo fue la presidenta de la asociación de las víctimas del atentado, era una impostora y el 11 de setiembre de 2001 ni siquiera estaba en la ciudad. En realidad, a estas alturas el debate sobre el negacionismo del Holocausto es un debate muerto, o como mínimo agonizante: sostener que está vivo sólo delata ignorancia sobre la realidad del Holocausto y las discusiones que giran en torno a él. O como en el caso Marco y de muchos combatientes contra el negacionismo, un deseo de magnificar su combate creando un enemigo ilusoriamente poderoso.

El principal argumento que se esgrimió a favor de Marco al estallar el caso es igual de incoherente pero más sofisticado que el anterior. La sofisticación es lógica: el desafuero perpetrado por Marco resulta tan palmario que salir en su defensa con alguna seriedad parece una empresa reservada a cínicos, sofistas o inteligencias intrépidas (o temerarias). Es verdad que el señor Marco nunca estuvo en Flossenbürg y que es un mentiroso. Pero es un mentiroso que decía la verdad: su minúscula mentria sirvió para difundir la ingente verdad de los crímenes nazis y, por lo tanto, no es condenable, o no es tan condenable como otras.

El argumento, ya digo, es insostenible, aunque cueste más trabajo refutarlo que el anterior. De entrada porque plantea dos problemas. El primero es descomunal, pero su formulación nos lleva a una pregunta senzilla: ¿es moralmente lícito mentir? A lo largo de la historia, los pensadores se han dividido respecto a esta cuestión: relativistas y absolutistas. Contra lo que cabría suponer, poerque el pensamiento tiende de manera indefectible a lo absoluto, los mayoritarios son los relativistas, aquellos que como Platón o Voltaire, razonan que la mentira no siempre es mala y a veces es necesaria, o que la bondad o la maldad de una mentira dependen de la bondad o la maldad de las consecuencias que provoca: si el resultado de la mentira es bueno, la mentira es buena; si el resultado es malo la mentira es mala. Por el contrario, los absolutistas argumentan que la mentira es en sí misma mala, con independencia de sus resultados, porque constituye una falta de respeto al otro y, en el fondo, una forma de crimen, como dice Montaigne. Pero incluso Montaigne que era gran defensor de la verdad defiende en un esayo recordando las nobles mentiras platónicas.

En realidad, hasta donde alcanzo sólo Immanuel Kant llevó a su límite lógico el principio absolutista de la veracidad. Kant puso un ejemplo célebre: supongamos que un amigo se regugia en mi casa porque lo persigue un asesino. Supongamos que el asesino llama a la puerta y me pregunta si mi amigo está en casa o no. En esta situación Kant afirma, mi obligación moral no es mentir sino, como en cualquier otra situación, decir la verdad: mi obligación no es decirle al asesino que mi amigo no está en casa, aun a riesgo de que entre y lo mate.

A Kant no le faltan razones, la más importante: la que desprende del imperativo categórico, según el cual hay que obrar de forma que podamos desear que todas nuestar acciones se conviertan en principios universales, válidos para todos. Traducido al ejemplo anterior, esto significa que a corto plazo mi mentira quizá provocaría el pequeño bien de salvar la vida de mi amigo, pero, dado que la sociedad se funda en la confianza mutua entre los hombres, a lorgo plazo acabaría provocando el enorme mal del caos absoluto. El argumento es impecable aunque seamos muy pocos los que queramos darle la razón entera a Kant.

Los defensores de Marco sostienen que las mentiras de Marco eran mentiras nobles. Sostienen que sí, fue un impostor, pero, como de sus labios jamás salió una falsedad histórica, sus ficciones dieron a conocer urbi et orbe la realidad de la barbarie del siglo XX y, por tanto, sus mentiras fueron buenas. Aquí reside el problema: ¿jamás salió una falsedad histórica de los labios de Marco? Supongamos por un momento que sus mentiras fueron altruistas y didácticas y no eran mentiras narcisistas y, por tanto, no mintió por protagonismo. Veamos el resultado de sus mentiras no el origen. Aquí la pregunta es ¿mentía Marco con la verdad?

Por supuesto que no. Aunque siempre procuró documentarse a fondo, leyendo libros y empapándose de los relatos escritos y orales de los supervivientes, Marco a menudo cometió errores e inexactitudes, de forma que sus relatos son con frequencia una mezcla de verdades y mentiras, que es la forma más refinada de la mentira, pero, al fin y al cabo, una mentira. Marco combina ficción y realidad, sin querer, por ignorancia o descuido. En ambos casos el resultado es idéntico. En su relato de la liberación de Flossenbürg publicado por la revista de historia L’Avenç, Marco afirma que, al igual que en otros campos de concentración, en éste existía una cámara de gas. Falso: en Flossenbürg nunca hubo una cámara de gas.

En El Impostor Javier Cercas utiliza varias expresiones para referirse a Enric Marco: unas veces Marco, otras Enric, nuestro hombre, Don Quijote, Alosno Quijano, un novelista, genio… pero a mí, la que más me gusta es la de poeta. Lean el libro y sabrán el porqué. No tiene desperdicio.

impostor enric marco

Desmontando a Pío Moa

Publicado: julio 4, AM en Cultura, Reflexiones

En una conversación de intelectuales, la llamaremos así, por qué no?, nos dedicábamos a debatir sobre el siempre polémico Pío Moa. La persona encargada de su defensa era un homre, de unos cincuenta y tantos, llamado Ramón. A quien le tocó intentar desmotar sus argumentos y, también a los del personaje fue a mí.

La introducción de Ramón, resumida en una frase, rezaría tal que así: El problema que tenéis todos vosotros contra Pío Moa es que saca a la luz nuevos datos históricos y a los señores no les gusta que la realidad sea de esa forma. Por mi parte, empezé con una cita de Stanley Payne: “El asunto principal aquí no es que Moa sea correcto en todos los temas que aborda. Esto no puede predicarse de ningún historiador y, por lo que a mí respecta, discrepo en varias de sus tesis. Lo fundamental es más bien que su obra es crítica, innovadora e introduce un chorro de aire fresco en una zona vital de la historiografía contemporánea española anquilosada, desde hace mucho tiempo, por angostas monografías formulistas, vetustos estereotipos y una corrección política dominante desde hace mucho tiempo. Quienes discrepen de Moa deben enfrentarse a su obra seriamente y, si discrepan, demostrar su desacuerdo en términos de una investigación histórica y un análisis serio que retome los temas cruciales“. 

Una vez terminadas nustras introducciones nos sumergimos en su revisionismo. Moa ha centrado la gran parte de su obra en la Segunda República, la Guerra Civil y sobre el Franquismo. Nuestro personaje ha debatido con historiadores de la talla de Enrrique Moradiellos y Justo Serna. (A quién agradezco enormemente su ayuda y referencia para informarme sobre el tema).

Cómo apunta el Dr. Serna «lo que Moa hace es reproducir sus artículos o diatribas, sin dar noticia de expresa de la respuesta de este o de aquel historiador. Por tanto, el lector de su volumen queda sin saber qué argumentaba la otra parte. Pero ese procedimiento intolerable en cualquier discusión académica no es lo peor. Lo más escandaloso es la aleación textual del libro: junto a esas discusiones historiográficas, el volumen reúne textos circunstanciales, de política actual, artículos, panfletos y proclamas.» Bien, esto parece ser una mezcla entre historiografía y sus altreaciones.

Su forma de argumentar no tiene ni pies ni cabeza, no sigue ninguna norma, por pequeña que sea, de argumentación. Los tesimonios y las fuentes los llega a utilizar con una gran dudosa función. Volvamos a ver lo que nos comenta el Dr. Serna: «Cuando éstos (los testimonios y fuentes) se atienen a la tesis previa que se desgrana en el libro, cuando aquéllas se ciñen a lo que quiere sostener, entonces se cita al adversario, incluso al enemigo, de quien se podrá tomar una u otra frase que se acomode al esquema interpretativo. Cuando así ocurre, Moa  no se pregunta por la verdad de ese testimonio. Sin más admite la certeza o el acierto, justamente porque confirman lo que él ya sabía de antemano. Cuando, por el contrario, el documento (del mismo testimonio, por ejemplo) contradice el hilo argumental, entonces lo atribuye a la falsedad o a la doblez o a la ceguera o a la ignorancia del testigo. Es decir, el expediente del ensayo (género nobilísimo donde los haya) le sirve para justificar su pereza documental o para legitimar sus temeridades interpretativas con frases sacadas de texto o de contexto.»

Ésta puede que sea una de las razones principales por las que los historiadores profesionales no hayan querido entrar en el debate con él. Sabiendo su ‘modus operandi’ y, sobre todo, los padrinos que posee (Libertad Digital y todo el entorno de Federico Jiménez Losantos que llega hasta Cadena Cope y esRadio) los intelectuales han preferido qudarse al margen. Otra razón puede ser la propagandística, es decir, tener confrontaciones con el sujeto es darle la publicidad que quiere, pues se desenvuelve como nadie en estas esferas.

Un caballero fundó la editorial Fénix en la qual ha publicado sus innumerables ejemplares en los quales cree desmembrar y iluminar ese oscuro mundo que cree que la izquierda de nuestro país es. Pero creo que si el servidor piensa que aclara la historia frente a las grandes mentiras marxistas, no serán ni un negocio ni una persona acreditados. Así es: tiene un público muy fiel aunque bastante escaso, en el qual ven al cancerbero del Generalísimo Franco.

Este caso editorial es el de Ricardo de la Cierva. Pero lo que distingue a nuesto hombre del señor De la Cierva es la retórica (bastante efectiva) que yace en el señor Moa. El profesor Serna los explica muy bien. Veámoslos: «Primer recurso: dice escribir historia en defensa  de la democracia, desvelar las trampas de los socialistas o de los republicanos para mostrar la naturaleza antidemocrática de la izquierda, su irremediable estalinismo, sean cuales sean su origen o su época. Vista una izquierda, vista todas, dado que la actual invoca o exhuma el recuerdo de aquella experiencia republicana. Por tanto, la identificación del presente con el pasado resulta la conclusión inevitable, fatal. Los socialistas de hoy son un calco de los socialistas revolucionarios.Si, además, dicha revelación se hace apelando a la democracia liberal, entonces el público potencial es mayor, afín al sistema parlamentario, pero debelador de una izquierda de comportamientos bolcheviques.» No importa si los comportamientos bolcheviques hayan desaparecido. Con lo que hay que tener cuidado es con los totalitarismos que llevan en su ADN y, por tanto, siguen siendo enemigos de la democracia. Propaganda a diestro y siniestro.

Aquí reposa su segundo recurso: la cobertura de los medios que le ofrece su gran amigo y padrino Jiménez Losantos. Todos sabemos cómo actúa el locutor: agitando y haciendo proaganda con la pulcritud del método leninista o maoïsta. El método de los ‘enemigos de la democracia’.

Veamos algunas reglas de la Propaganda Política (libro de Domenach). En primer lugar el enemigo común: para Moa son los socialistas y la izqueirda de los años treinta y actuales. En segundo lugar la desfiguración: dar bombo a la información que le interesa y ‘herir al adversario’. En tercer lugar la orquestación. Para Moa la revolución de 1934 es el inicio conspirativo de la izquierda de todo lo posterior. Prueba de ello es la visión conspirativa de los atentados del 11-M. Llegamos al cuarto lugar: la propaganda política. Así nos lo explica el Dr. Serna: «la propaganda eficaz no inventa de la nada, no crea algo inexistente, sino que, por el contrario, opera sobre un sustrato preexistente de ideas, sentimientos o necesidades, una serie de preocupaciones o de evidencias de la ciudadanía que, debidamente transferidas y manipuladas, parecen ser evidentes y propias.  Moa no dice nada  nuevo que el sentido común franquista no haya dicho ya, pero en vez de revestirlo con un aparatoso envoltorio franquista, lo justifica con un bla-bla-bla demoliberal.» En último lugar el contagio: hay que hacer llegar la información para contagiar a la gente indiferente. Aquí el papel que juega Libertad Digital es vital para la infestación.

Pasemos a la disciplina histórica. Un hecho histórico u objeto histórico no se iluminan de un día para otro. Hay unas reglas, un método a seguir. Antes que nada, hay que leer una bibliografía sobre el hecho u objeto histórico para informarse y plantear hipótesis. Hay que tener paciencia. Posteriormente de haber terminado con la biliografía y realizada la hipótesis, en la investigación se exige una exploración de documentos y archivos. Con toda la información y testimonios construirá historia y, repito, es una tarea laboriosa que exige paciencia.

Cumplimentados todos éstos pasos con paciencia y rigor llegamos al tema de la redacción. Aquí no es un todo vale. Requiere inteligiencia y destreza. Hay que saber transmitir, comunicar la información y generar un efecto de curiosidad al lector. Que se sentirá antraído por la curiosidad y querrá saber más.

Bien, superados los problemas del método histórico, aún nos queda un problema, y no es para nada pequeño. La propaganda de Moa. En la sociedad de nuestros días hay medios de comunicación, numerosos y de todo tipo. Cómo debe ser. Los historiadores han pensado que su no integración en los medios se paliaría con divulgación. Cómo dice el professor Serna «El historiador no puede dejar de conectar lo que trata, lo que aborda, con el tiempo histórico en el que vive. Si exhuma el pasado como si éste tuviera valor en sí mismo, el lector menos informado probablemente  se desinteresará, creyendo que esas piezas desenterradas nada tienen que ver con él. Pero lo que el historiador no puede ignorar es el estado general de la comunicación que hoy hay.» En nuestro país los Revisionistas ven que sus agitaciones y propagandas surten efecto.

Al tiempo que los Revisionistas se centran en todos los medios de comuniación, los historiadores, serios y metódicos se dedican a la divulgación dejando que vendedores de mercadillo ocupen el gran espacio comunicativo. Decía Stanley Payne que «los críticos adoptan una actitud hierática de custodios del fuego sagrado de los dogmas de una suerte de religión política que deben aceptarse puramente con la fe y que son inmunes a la más mínima pesquisa o crítica. Esta actitud puede reflejar un sólido dogma religioso pero, una vez más, no tiene nada que ver con la historiografía científica”.

Agradecer enormemente la ayuda que me ha prestado el Profesor Justo Serna al proporcionarme la información para poder llegar a desmontar a Pío Moa. Su artículo completo lo pueden ver aquí:

– http://justoserna.com/2009/11/25/pio-moa/

EL PROJECTE MANHATTAN ESPANYOL IV

Publicado: junio 30, AM en Cultura

La setmana passada ens vam quedar parlant sobre l’obtenció de material radioactiu per tal de poder començar amb la fabricació de la bomba atòmica. Espanya era el segon país europeu amb més reserves de plutoni al subsòl i per a posar en marxa l’obtenció del material es va utilitzar la central de Valldenòs. D’aquesta forma, treballaven amb la tecnologia més innovadora, s’aliaven amb el veí francès i no hi hauria tanta dependència dels Estats Units.

L’interés en la bomba atòmica es transformaria en preocupació a partir del 11 de juny de 1973, quan Carrero Blanco es va convertir en president del Govern. Anticomunista convençut, no tenia excessives simpaties pels Estats Units (encara que el seu home de confiança i ministre d’Afers Estrangers, Laureano López Rodó, el qualificava d’atlantista), i molt menys per Israel, ja que en realitat era partidari de l’amistat amb els països àrabs, i sobretot de donar un gir a les relacions amb la superpotència del món occidental, perquè el president del Govern espanyol exigia una relació d’igual a igual amb els nord-americans, el lliurament de tecnologia militar sofisticada i el compromís nord-americà de defensar el país, si els nord-americans volien seguir utilitzant les bases que tenien en territori espanyol.

El 15 de desembre de 1973, Velarde es va reunir amb el tinent general Manuel Díez-Alegria, cap de l’Alt Estat Major (AEM), i amb el seu home de confiança, el General de brigada d’Artilleria Manuel Gutiérrez Mellado, on el científic els va explicar que Espanya tenia capacitat per fabricar tres bombes de plutoni a l’any.

Díez-Alegria li va ordenar que posara aquestes conclusions per escrit en un màxim de dos folis d’espai, redactant-ho anglès i espanyol, i que el dirigira al president del Govern, ja que ho necessitava de cara a l’entrevista que mantindria uns dies després amb el secretari d’Estat nord-americà, Henry Kissinger. Velarde va denominar al seu informe Estat actual del Projecte Islero. Per lliurar-lo al president del Govern d’Espanya, i una vegada redactat, el va donar a Díez-Alegria, que després de donar-li el seu vistiplau, el va titular «Dos folis radioactius».

Quatre dies després, Carrero Blanco es va entrevistar amb Kissinger. Durant la conversa, va eixir a la llum el desig del Govern espanyol que els Estats Units garantiren el seu suport en cas d’agressió. Davant la negativa de Kissinger a acceptar aquest compromís, Carrero Blanco li va ensenyar l’informe de Velarde, provocant una commoció en el secretari d’Estat i en l’ambaixador americà a Madrid, l’almirall Horaci Rivero, fins al punt que Kissinger va demanar al president del Govern espanyol que mantinguera en secret la conversa perquè estava convençut de la serietat del pla i de la disposició espanyola de tirar-lo endavant.

Aquest mateix dia, i amb certa urgència, Kissinger va abandonar Madrid. Al dia següent, el 20 de desembre de 1973, Carrero Blanco va ser assassinat per l’organització terrorista nacionalista basca ETA, en un atemptat mai prou aclarit, i en el qual alguns autors vinculats a la teoria de la conspiració, com David Zurdo  o Pilar Urbano, han insinuat la participació de la CIA, entre altres raons, pel desig d’acabar amb el projecte polític que representava el president del Govern espanyol, inclòs el seu desig de dotar a Espanya d’armament nuclear. Fins prompte.

La bomba atòmica, coneguda com a Projecte Islero, va ser un dels plans més secrets i misteriosos del franquisme equiparat al Projecte Manhattan americà.

L’origen del Projecte Islero, que d’haver-se conclòs amb èxit, haguera convertit a Espanya en membre del club més selecte del món i l’haguera dotada d’un poder de dissuasió total en la seua àrea d’interès geoestratègic (l’eix Balears / Estret de Gibraltar / Canàries), pot fixar-se el 22 d’octubre de 1951, quan, mitjançant el Decret-Llei d’aquesta data, es crea la Junta d’Energia Nuclear (JEN), la funció de la qual era actuar com a «centre d’investigació, com a òrgan assessor del Govern, com a institut encarregat dels problemes de seguretat i protecció, contra el perill de les radiacions ionitzants i com a impulsora del desenvolupament industrial, relacionat amb les aplicacions de l’energia nuclear» . El seu primer president, des de 1951 fins a 1955, seria el tinent general Juan Vigón Suerodíaz.

Quatre anys després, al juliol de 1955, Espanya va signar amb els Estats Units d’Amèrica  un acord de cooperació nuclear a l’empara del programa ‘Àtoms per a la pau’. Aquestes ajudes van permetre que el 27 de desembre de 1958, el general Franco, acompanyat del ministre de la Presidència, Luís Carrero Blanco, inaugurara el Centre Nacional d’Energia Nuclear Juan Vigón a les instal·lacions construïdes a la Ciutat Universitària de Madrid.

Des del primer moment i a semblança de la JEN i altres organismes de l’Estat, les Forces Armades van tindre un paper directiu en el nou centre. Però inicialment, ni aquest ni la JEN van tindre un caràcter militar. Però tot açò canviaria com a conseqüència d’un esdeveniment en la nostra àrea estratègica: la independència del Marroc en 1956.

Immediatament, el nou país, va mostrar una gran agressivitat cap als territoris espanyols a l’Àfrica: la primera manifestació va ser la crisi d’Ifni (1957-1958), durant la qual, Estats Units (la presència del qual en aquest país africà era molt forta des de que les seues tropes van desembarcar en 1942, i que era el principal baluard de la Central Intelligence Agency ‘CIA’ al Magrib) va prohibir a les Forces Armades espanyoles utilitzar el material de guerra cedit en virtut dels acords signats el 1953.

Per al general Franco i el seu Govern (especialment el capità general Agustín Muñoz Grandes, vicepresident del Govern, i Carrero Blanco, home fort del règim), la bomba atòmica es va convertir a partir d’aquest moment en una necessitat, no només per potenciar el paper d’Espanya en el sud d’Europa i la Mediterrània, i reforçar el seu paper internacional, sinó sobretot per dissuadir al Marroc de que atacara els territoris espanyols fora de la Península, ja que sabien que, en el cas que esclatara un conflicte amb el país nord-africà, no podrien comptar amb l’ajuda nord-americana, i per pressionar Gran Bretanya en el problema del penyó de Gibraltar. Fins prompte.

La setmana passada vam començar la sèrie sobre El Projecte Islero: la bomba atòmica espanyola. Vam tractar els seus orígens, els dirigents que dirigien i JEN i la raó defensiva. Una possible guerra contra el Marroc i Ifni que, amb aquesta arma, podria decantar la balança.

Per aquesta raó, en 1963, Muñoz Grandes (falangista i molt poc amic dels Estats Units com deixaria escrit el tinent general Carlos Iniesta Cano), va encarregar al director de la JEN, l’enginyer i almirall José María Otero Navascués, un estudi sobre les possibilitats reals que tenia el nostre país de construir una bomba atòmica sense alertar a la comunitat internacional. Naixia així el Projecte Islero (nomenat així en honor del bou miura que havia provocat la mort de Manuel Rodríguez Sánchez Manolete, el 29 d’octubre de 1947). La responsabilitat de dur-ho a terme va recaure en el catedràtic de Física Nuclear i comandant de l’Exèrcit de l’Aire, Guillem Velarde, nomenat cap de la Divisió de Teoria i Càlcul de Reactors.

Aquest projecte va constituir, en els primers moments, un autèntic fracàs. Els especialistes de la JEN (tots militars) es van mostrar incapaços tant de construir la bomba com d’obtindre el plutoni necessari per fabricar-la. De fet, el 1965, Franco, que també tenia gran interès en el projecte, no va mostrar gran interès en la seua continuació. No obstant això, el pla es va mantenir gràcies a l’interès de Muñoz Grandes i de Carrero Blanco, que sempre van dotar de recursos al projecte per al seu finançament.

Tot canviaria el 17 de gener de 1966. Aquest dia, un avió cisterna KC-135 i un bombarder estratègic B-52 van col·lisionar en l’aire sobre l’espai aeri de Palomares (Almeria), morint set dels seus tripulants, mentre que quatre saltaven en paracaigudes. El bombarder portava quatre bombes termonuclears Mark 28 (model B28RI) de 1,5 megatones, que van caure sobre la zona, tres a terra i una al mar. De les primeres, dos ho van fer sense paracaigudes, explotant la càrrega convencional que contenien, la funció de la qual era provocar la reacció en cadena del material nuclear.

Els tècnics espanyols, encapçalats per Velarde, van rastrejar la zona on havien explotat dos bombes i van trobar restes de la mateixa i dels detonadors, el que els va permetre posar de nou en marxa el projecte Islero, però ara sí amb moltes possibilitats de culminar amb èxit . De fet, el primer document oficial on es reconeixia la capacitat espanyola per fabricar la bomba atòmica data de l’any següent, i es tractava d’una circular interna del Ministeri d’Afers Exteriors a diverses de les seus ambaixades a l’estranger.

Però la demostració més clara que el pla seguia endavant va ser que Espanya no va ser un dels signataris del Tractat de No Proliferació Nuclear (TNP), signat l’1 de juliol de 1968 per 43 països, entre ells tres nuclears: Unió Soviètica, Estats Units i Gran Bretanya. Aquestos no estaven disposats a destruir el seu armament nuclear ni a congelar la seua fabricació. Per contra, aquest mateix any, es va instal·lar a la seu de la JEN, a la Ciutat Universitària de Madrid, el primer reactor ràpid nuclear espanyol, anomenat Coral-1, amb capacitat per produir plutoni de tipus militar. Fins prompte.

La setmana passada ens vam quedar parlant del fracàs que va suposar el Projecte Islero en els primers moments de la seua existència. Però, aquesta situació canviaria a partir del accident nuclear de Palomares, on van caure 4 bombes termonuclear. Des d’aquell moment, el Projecte es va reactivar i van intentar produir plutoni de tipus militar.

Els primers grams d’aquest material, els únics en la història que no van ser controlats per l’Agència Internacional de l’Energia Atòmica (OIEA) (encarregada de vetllar per la no proliferació nuclear), es van obtindre l’any següent, en el més absolut dels secrets. La bomba atòmica era ja viable.

Tres anys després, el 1971, Velarde i un grup de militars, entre els quals es trobaven els coronels Tomás Pallás i Federico Michavila, a través del Centre Superior d’Estudis de la Defensa (CESEDEN), van elaborar un informe confidencial en el qual s’assenyalava en les seues conclusions que «Espanya podia posar en marxa amb èxit l’opció nuclear militar». Segons aquest estudi, podia dotar-se en poc temps del seu propi armament nuclear utilitzant els equips de les que ja es disposava. Es donava especial importància a la central de Vandellòs (Tarragona) (dotada de tecnologia francesa), que s’inauguraria el 6 de març de 1972, com a font per a l’obtenció de plutoni militar. Finalment, l’estudi indicava la possibilitat de realitzar la primera prova nuclear en el desert del Sàhara, al sud de Smara, amb un cost aproximat de 8.700 milions de pessetes per cada bomba.

El primer pas per culminar el projecte era l’obtenció del plutoni suficient per construir una bomba (6 quilos), alguna cosa factible per dos raons. La primera: que el subsòl espanyol contenia les segones reserves més importants d’urani natural d’Europa (4.650 tones avaluades), mineral del que s’obté el plutoni. La segona: que els residus que produïa la central de Vandellòs eren ideals per a obtindre’l, i com estava construïda amb tecnologia francesa, i aquest país, com a potència atòmica, no permetia a la OIEA que inspeccionara les seues instal·lacions nuclears, el secret estaria salvaguardat.

A més, tant el general Charles de Gaulle com el seu successor al capdavant de la Presidència de la V República, Georges Pompidou, eren partidaris de que Espanya es convertira en potència nuclear i aliada seua, però al mateix temps amb autonomia respecte als Estats Units i la organització del Tractat de l’Atlàntic Nord (OTAN).

En aquestes circumstàncies, i tenint en compte que, des de l’accident de Palomares, no hi havia dificultat en relació amb la tecnologia necessària per a fabricar l’artefacte, la bomba atòmica espanyola es convertia en una realitat factible. Fins prompte.